Llevaba tiempo queriendo hacer en casa esta receta de origen húngaro. Es una versión reducida que encontré en un libro de recetas del Lidl "Para invitados especiales", y aproveché que indicaba que era sencilla para hacer una primera prueba.
Ha ido estupendamente, así que os la dejo por si no os atrevéis con la original.
Ingredientes:
1 kg de ternera
100 gr de beicon
2 cebollas medianas
375 ml de caldo de carne (se puede hacer con agua y granulado de caldo de carne)
1/2 cucharada de comino molido
1 pizca de pimentón picante
200 gr de nata agria o crême fraîche
1 cucharada de harina
Preparación:
Cortamos el beicon en tiras y la cebolla en trozos pequeños y los añadimos a una cazuela con aceite. Seguidamente añadimos la ternera y salteamos durante unos 5 minutos a fuego fuerte sin dejar de mover.
Mientras tanto calentamos el caldo de carne o el agua para añadirle el granulado.
Añadimos la sal, pimienta, comino y pimentón picante y seguimos cocinando la ternera.
Una vez que se ha consumido el agua que suelta la ternera, añadimos el caldo de carne caliente y dejamos cocinar a fuego lento y tapado durante una hora.
Mientras tanto, mezclamos la nata con la cucharada de harina y una vez que se haya terminado la cocción, la añadiremos al estofado y mezclaremos hasta integrar todos los ingredientes.
Una vez que repose, se recomienda servir con patatas cocidas, tallarines o ensalada verde.
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