Casi se me ha olvidado ya, el tiempo que hace que no publico una receta... y es que, aunque se me olvida todos los años, el verano es una época de mucho trabajo para mi, así que dejo de hacer muchas cosas, entre ellas, cocinar por gusto.
Pero como no se puede abandonar todas las aficiones del todo, de vez en cuando saco tiempo para cocinar, hacer unas fotos y publicar la receta. Y esta es una de esas veces.
Seguro que habrá muchas recetas de pechugas rellenas circulando por la red, y seguro que esta se parece a alguna, pero no me he fijado en ninguna en concreto, si no que vi lo que tenía en el frigorífico que le fuera bien, y las hice :P
Ingredientes:
1 pechuga fileteada (unos 8 filetes)
4 lonchas de jamón
4 tranchetes
Un puñado de pasas sin hueso
Medio vaso de vino blanco
Aceite, sal y orégano
Preparamos una fuente de horno, con un poco de aceite en el fondo.
Precalentamos el horno a 200ºC.
Rellenamos cada filete de pechuga, con media loncha de jamón, medio tranchete y unas cuantas pasas... la cantidad dependerá de si lo queréis más o menos dulce.
Se enrolla cada filete con cuidado, se pincha con unos palillos para evitar que se abra, y se coloca en la fuente, previamente preparada.
Una vez que tengamos todas las pechugas rellenas y colocadas en la fuente, las regamos con el vino blanco, añadimos un poco de aceite por encima y le añadimos un poco de sal y orégano.
Ya están listas para hornear... bajamos el horno a 180ºC y horneamos durante 40 minutos. Si os gustan más o menos hechas, debéis ir mirando de vez en cuanto el horno para comprobar que están en su punto.
Una vez listas, podéis acompañarlas con una ensalada variada, que seguro que queda estupendamente.
¡¡¡Qué aproveche!!!
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